jueves, 14 de marzo de 2013

Hormiguita


Solías entender lo que escribía sin hacer falta explicaciones, tan solo con una frase captabas todo mi mundo fiel a la verdad. Escribíamos frase a frase sacándonos de este mundo por horas que se convertían en sueños alcanzables, sueños hechos realidad, y nos transportábamos a un mundo fantástico e infantil donde todo se podía y nada era imposible.
Vivíamos mil historias diferentes cada vez más elaboradas e increíbles, con un pie en la tierra y otro en la luna, eso sencillamente me gustaba.
Durante años nuestras historias saturaban la ida y venida de información, yo adornaba todo tu mundo, haciéndolo grandioso e invencible y tu me hacías soñar con principes azules que luchaban por el amor contra ángeles vestidos de demonios, ambos vivíamos en una historia creada solo para nosotros, donde cada uno, se iba a dormir con una de las mayores sonrisas; soñando cosas que nadie llega a imaginar, una historia paralela a nuestras vidas, que día a día, nos llenaba de fuerza y felicidad, de saber que podríamos con todo.

Hoy sigo sabiendo que puedo con todo, sigo escribiendo, sigo soñando, tu, dejaste de querer entender mis historias.
Ahora tienes un carácter añejo, que no te deja llegar a nuestro paralelismo, pensabas en otras cosas y te importaba más indagar en temas banales, de príncipe a diablo. A veces echo de menos el que fuiste pero jamás al que hoy eres.
Y en mi mundo ya no hay príncipes, vampiros ni dragones, desde hace mucho, pero siguen estando mis historias, llenas de sueños cumplidos y sueños por haber, donde yo fabrico mi reino lejos de niños de rostros arrugados y caprichosos, que si no consiguen lo que quieren se caen en un pozo y jamás vuelven.

Y a esa hormiguita gigante, le salieron alas porque anhelaba ver el cielo desde más cerca, se alejó de sus compañeras viendo como paradójicamente se hacían más pequeñas, y enseñando todos sus dientes, desapareció, sabiendo que lograría todo lo que pudiera imaginar e imaginar siempre fue su oficio.

jueves, 20 de enero de 2011

EN ESTOS TIEMPOS, EN LOS QUE NO SE HABLA DEL AMOR



En estos tiempos, en los que las personas no saben amar, en los que el amor se vuelve sexo, y el conocer a una persona, en libertad para poder mantener relaciones paralelas, me siento desconcertada, sin saber si soy yo quien anda en esta época, perdida... o son ellos quienes quizás lo estén.

Esta época, en las que las relaciones ya no son lo que eran, en las que las personas ya no son lo mas importante, y suplantamos esas carencias buscando una nueva manera de ver el amor, que nos tenga distraídos para no sentir esa soledad y necesidad de amar, que quizas en nuestro interior anhelemos...

Esta época en la que, una bonita posible relación se convierte en una libertad promiscua, donde no hay reglas, donde los principios y el respeto se dejan a un lado, para pasar a la locura, al disfrute momentáneo....

Esta época en la que, por ser y sentir diferente, no eres mas que una tonta enamoradiza o una niña chica por creer aun en el amor, esta época en la que te rompen el corazón una y otra vez, y piensas que lo único que puedes hacer es unirte a ellos, pese a no pensar igual y sentir totalmente diferente .
Esta época en la que entras en conflicto contigo misma, por pensar unas cosas y hacer otras.
Esta época en la que conocer a alguien no es tan mágico y respetuoso como antes.
Esta época que tan solo se limita, a los sueños individualistas, a seguir un camino fijo con un rumbo muy marcado del que nadie por mucho que puedas sentir, podrá sacarte.
Por que en esta época, parece que lo único importante es sentirse bien con uno mismo y olvidamos lo bonito que es sentir tan solo un latir de dos corazones, esa conexión extraña y transparente que hace que dos personas estén atadas en un mismo sentimiento que los hace sencillamente sentirse envueltos en un propio mundo, donde el tiempo deja de transcurrir con normalidad y se vuelve mas espeso y lento el cual da opción a una realidad paralela de la vida, en la que no hay nada mas que ellos.
No dejemos olvidados a el amor, no lo pisoteemos, en esta época en la que, mas que nunca el amor es mas que necesario, si somos diferentes no le demos las espaldas y nos unamos a la mayoría, para no sentirnos raros, cuando lo que realmente todos queremos es un poco mas de respeto sobre nosotros mismos y a esa cosa que muchos ya no saben como llamar, a la que hace mucho tiempo se le llamaba. AMOR.